Begiak Hesteko Artean (In Ictu Oculi)
Jorge Moneo Quintana
Siete siglos hechos piedra se desploman sin nostalgia alguna en lo que dura un parpadeo. A la frecuencia variable de este parpadeo algunos la llaman Historia, otros luchas de clases, progreso, barbarie o cine. Si asumimos que la acumulación de parpadeos durante una vida es alta, podemos concluir que pasamos buena parte de ella despiertos aún con los ojos cerrados. Entonces, ¿no habremos, tal vez, sobreestimado la capacidad de la imagen y por tanto de la visión como privilegiados proveedores de consciencia? ¿Cuántos aleteos del párpado serán necesarios para fijar en la mirada un mundo que se destruye así mismo?