Sueños de libertad
Jaime Contreras y Nuria Lopez Leal
Fernando Macarro comenzó a escribir poemas en la cárcel, así podía mantener el recuerdo de su vida en libertad y las palabras podían viajar libres fuera de los penales. Firmaba con el seudónimo de Marcos Ana para que no pudieran señalarle; nadie en el penal sabía que él era el famoso poeta. A través de la valiosa obra de Marcos Ana descubriremos ese periodo de la historia en el que hombres comunes vivieron momentos excepcionales.